El aquelarre que llega: IX Asamblea Federal de IU

Crónica precongresual

Como ya he anunciado en una entrada anterior, los próximos 15 y 16 de este mes se celebrará la IX Asamblea Federal de Izquierda Unida en Rivas-Vaciamadrid. En ella, el que suscribe informará sobre el acontecimiento en este blog, y junto a otros blogueros y periodistas les recuerdo que en Twitter tendrán información constantemente actualizada.

Creo que no es necesario recordar lo mucho que nos jugamos en el envite. No ha querido entrar en la lucha cuerpo a cuerpo de este proceso, simplemente lo he observado desde dentro pero alejado. Hace tiempo que por iniciativa propia decidí seguir el combate en segunda o tercera fila. Y, por lo tanto, mi intención es explicar lo que sé, desde este blog, con un objetivo de informar hacia fuera y no de hacerlo en clave interna.

En calidad de implicado distanciado, les voy a contar como veo este proceso:

Hoy todavía se están manteniendo reuniones para que se presente una única línea política, solamente se ha conseguido, y no es poco, una única declaración de apertura, pactada por los tres grupos que conforman hoy IU, que abrirá la Asamblea, ya conocida como la Declaración de Rivas.

Los tres grupos que llegan a la Asamblea tienen listas distintas que encabezan: Cayo Lara, el sector mayoritario, al que apoya el PCE --se habla de un 45% de apoyos--, Inés Sabanés del sector que agrupa a los mal llamados llamazaristas --que cuenta, según dicen, con el 30% de apoyos, y Joan Josep Nuet, del sector conocido como la Nacional II --con una estimación de un 19% de apoyos. Además Sánchez Gordillo ha conseguido los avales necesarios, por lo que encabezará otra lista, desconozco los apoyos que tiene (avales un 6%).

Como se puede observar ninguno tiene la mayoría absoluta por lo tanto el nuevo coordinador habrá de ser fruto de pactos entre ellos.

La primera cosa que me gustaría resaltar es que los militantes de base han pedido desde las asambleas locales celebradas, una única ponencia política sin haberse logrado. A pesar de que todos estaban de acuerdo en que se coincidía en un 90%, entre ellas. Luego, ¿por qué no se llega a un acuerdo? ¿Tan difícil es limar ese diez por ciento que las separa?

La verdad es que hay diferencias de método y personales, que no ayudan a esa unificación, tan necesaria a mi modo de ver. Sin embargo, espero que éstas salgan a la luz en la próxima asamblea y que el documento político aprobado con el coordinador saliente sea el referente único de los militante, y sobre todo, el de los votantes reales y potenciales de IU.

No voy a entrar en las causas del fracaso de IU en las últimas elecciones, todos sabemos que ha habido causas exógenas importantes, pero no debemos olvidar que hemos hecho cosas mal que han determinado también ese desastre.

La Asamblea que se va a celebrar ha de ser, así parece que lo admiten los tres grupos, una asamblea que sirva para hacer despegar a Izquierda Unida, que tome el pulso necesario a la realidad y que desemboque con una línea política propia y única en una definitiva asamblea a celebrar en un plazo razonable, año o año y medio. Ese tiempo ha de ser el que sirva para refundar IU y nos haga salir del ostracismo político.

Hay cosas que no parecen las ideales para que se dé una Asamblea relajada y consensuada. La primera el encono que ha provocado los resultados electorales y que ya venía dándose dentro de las distintas formas de pensar en IU. Otra sería el hecho de que a estas alturas parecen limitadas las posibilidades de un documento político único, a pesar de la petición de la base militante. Y por último el hecho de que haya cuatro listas.

Hay cosas muy positivas. La primera es que se ha llegado a la conclusión de que no sólo no nos favorecen los factores exógenos, sino que tenemos mucho que corregir dentro de la organización, autocrítica que se asume desde todos los grupos.

También es positivo que ya que hay varios candidatos, éstos sean personas que, en general, apenas generan rechazo en los otros grupos.

Y desde luego hay cuestiones que no se pueden dejar por más tiempo y que en esta Asamblea deben salir como mandatos prioritarios: Uno es la revisión de los censos de IU en las distintas autonomías y otra es la obligatoria renovación de los cargos públicos y de nuestra organización, sin excepciones. Hay que renovarse en política para adaptarse a las situaciones reales y hay que renovarse en las personas, las sillas hay que cambiarlas cada cierto tiempo por cuestiones de higiene política.

No se puede perder más tiempo. Así de claro. Mucha gente espera un partido neto de izquierdas. Y esta oportunidad puede ser la última. O nos movemos o podemos desaparecer.

Salud y República