Durante todo el día se están celebrando actos en muchos lugares, promovidos desde la blogosfera. Desde esta bitácora, este poeta de medio pelo, con todo el corazón –poco dotado para las artes poéticas—, se une a este homenaje a un pueblo ultrajado que ha sufrido una masacre con un total de casi mil trescientos muertos –de ellos, trescientos niños—, y una destrucción casi total de su tierra.
Aunque haya una incipiente paz, una frágil paz, el daño hecho es irreversible. Esperemos que la justicia, y no sólo la paz, esté presente en esta nueva etapa.
Este poema está escrito hace quince días, en pleno conflicto.
Luces blancas y amarillas,
que sustituyen al sol,
llenas de azul y ceniza:
van cayendo.
Una ciudad color humo
con metales y morteros;
van socavando las casas
en silencio
grandes pájaros de acero,
vuelan vomitando fuego
mientras abajo se esconden,
con su miedo.
Una estrella de seis puntas
en un caballo a galope
va pisando por el fango:
a los muertos.
Ojos que brillan y gritan,
voces que piden auxilio;
morenos, piel aceituna:
Son los niños.
Cuerpos con sangre y con yeso,
llenos de hambre y miseria,
gritan mirando hacia el cielo:
van en cueros,
son los niños de esta guerra,
es gente que desespera,
palestinos atacados
en su tierra;
del otro lado, matando
con excusas amañadas
y equidistancias falaces:
mil muertos.
Genocidio controlado,
quieren ocupar su tierra
israelíes asesinos
a la fuerza.
Malditos los asesinos
que sin razón y con odio
aniquilan a la gente
palestina.
Salud y República
6 comentarios:
Rafa, Nada más y nada menos que GRACIAS!!!
No sabes hasta que punto me ha emocionado tu Entrada y este Poema...
Un beso cariñoso!
Sin ánimo de ofender, esto de las poesias por el pueblo Palistino...¿Para qué?
Palestina, necesitas cosas más necesarias.
Gracias Selma. Un beso
Miguel, no ofendes, pero no entiendes. No se trata de que se soluciona el conflicto con la poesía. Sí se trata de unir conciencias para saber que con la palabra poética se sirve de altavoz, de denuncia. Es otra forma de manifestación de denuncia del genocidio.
¡Que no nos callen! ¡Aún nos queda la palabra!
Salud y República
la poesia es un arma cargada de futuro...lo dijo alguien, creo, y no se equivocaba. Un abrazo, Don Rafa.
Gabriel Celaya, amigo Fritus.
Y sí, hay que denunciar para que se sepa al menos quién tiene la razón de su parte, así como quién abusa de la debilidad ajena.
Beso grande
Holocausto?.... Lo que el Holocausto?!
Publicar un comentario