24 enero 2010

Artículo de la semana (23): La derechona gana en Chile

Hace una semana hubo elecciones en Chile, donde la derecha ganó la presidencia. Venció el empresario Piñera, un Berlusconi a la chilena, populista heredero del pinochetismo convertido, a la fuerza, en un partido “demócrata”.

La alianza de la Democracia Cristiana y el Socialismo chileno (concertación) ha perdido las elecciones. Gabriel Salazar, historiador y escritor chileno, reproduce un artículo en Kaosenlared.net y explica el daño que la concertación ha hecho en Chile al haber adoptado el mismo modelo neoliberal de la derecha. Como dice Salazar se vistieron con lo prestado, y de esos polvos, estos lodos. Aquí les dejo con este interesante artículo:

Chile; ¿neoliberalismo recargado?

En lo ajeno reina la desgracia” dice la sabiduría popular. La Concertación tomó prestado para sí, en 1990, el extremista modelo neoliberal que dejó como herencia la brutal dictadura del general Pinochet. Y durante 20 años lo administró con tal “fe neoliberal” que hasta lo dejó instalado en el selecto club neoliberal de la OECD. Por tanto, desde la perspectiva del neoliberalismo mundial, los gobiernos de la Concertación fueron excepcionalmente exitosos.

Vestirse con lo prestado es un juego riesgoso. Creer, además, que lo prestado es identidad histórica de uno mismo es, lisa y llanamente, alienación. O esquizofrenia. Dejar como legado, por un lado, un Museo de la Memoria (con los crímenes de la dictadura) y, por otro, al modelo chileno instalado en la OECD es, en lógica pura, deambular por la historia sin rumbo. Girando en círculos. Disparando “díscolos” a derecha e izquierda. En 1998 un informe de PNUD declaró que los chilenos estaban corroídos por dentro por un grave “malestar interior”. El mismo que corroyó el alma histórica de la Concertación y la confianza de la ciudadanía progresista en ella.

No se puede hacer política con ropa prestada. Ni pretender ser socialcristiano o socialista cuando en los hechos se es neoliberal. Ni negarse a reconocer la mentira.

La coalición genéticamente neoliberal (que apoyó al candidato triunfante) gozó de una vacación política de cuatro lustros; sus adversarios gobernaron impecablemente como si fuera ella. Así que pudo desplegar una inédita oposición populista. Es primera vez, desde 1932, que una coalición de derecha gana la presidencia por mayoría absoluta. Es un hecho insólito, tanto más, si se considera que el 68% de los chilenos no tienen un contrato laboral permanente, sino precarista; que otro 68% gana menos de $ 180.000 –pesos- mensuales; que el 62% de los niños que nacen en un año son “huachos” (sin familias constituidas); que el 46% de los chilenos padecen de neurosis o depresión; que 66% de ellos no lee ningún libro en el año; que la tasa de delincuencia se mantiene alta e intratable; que se está impulsando otra militarizada “pacificación de la Araucanía”, etc. El gobierno genéticamente neoliberal que se inicia este año tendrá, pues, que lidiar con los males generados por el mismo neoliberalismo, sin salirse de las pautas de decencia legal exigida por la OECD, los tratados de librecomercio y las inefables clasificadoras de riesgo. La Alianza triunfante tendrá que enfrentar esos problemas sin poder suprimir las causas que los producen (como le ocurrió a la Concertación). Sería suicida. Así que no puede cambiar nada. Será más de lo mismo.

Por tanto, los ciudadanos progresistas que votaron neoliberal recargado, no verán resueltos sus problemas. Tal vez, se compliquen. Con el agravante de que no habrá más “museo de la memoria”. Y esto, precisamente, reactivará la memoria viva de la ciudadanía. La de la Dictadura y la del Mercado. Y de esa memoria viva es mejor que el nuevo gobierno sepa precarverse. Pues allí sigue, agazapada, la verdadera soberanía popular.

Quisiera añadir a este artículo, un vídeo, también visto en Kaosenlared.net que demuestra de dónde salen muchos de los seguidores de Piñera. En él, están celebrando el triunfo del nuevo presidente. Y es que, el hecho de haber elegido una transición democrática a la española ha hecho, al igual que ocurrió en España que las fuerzas de la dictadura no desaparecieran, sigo que hayan estado ocultas preparándose para el festín que prevén al haber ganado la derecha.

Ya han escuchado los vivas a Pinochet, los insultos a los comunistas y unas cuantas pruebas más de que muerto el perro no se acabó la rabia. ¡Suerte a Chile!, que la va a necesitar

Salud y República

8 comentarios:

m.eugènia creus-piqué dijo...

Me decía una bloguera chilena que no entendía como estando tan contentos con Michele ahora salía una derechona cromagona, son así las cosas, que no0 les pase nada.

Ciberculturalia dijo...

INteresantísimo artículo que intenta explicar lo ocurrido en Chile. Me es dificil entenderlo salvo porque la "concertación" lo hizo rematadamente mal. Y me es dificil porque su pasado pinochetista está a la vuelta de la esquina y debería haberles dado terror. El vídeo es una muestra

Buen domingo. Un beso

Montse dijo...

Como tú muy bien dices "haber elegido una transición democrática a la española ha hecho, al igual que ocurrió en España que las fuerzas de la dictadura no desaparecieran, sino que hayan estado ocultas preparándose para el festín que prevén al haber ganado la derecha". Y si encima cuando gobierna la izquierda tiene sólo de izquierda el nombre pero no las políticas económicas reales pues entonces...

Esperemos que las cosas no vayan demasiado mal para los hombres y las mujeres de Chile.

Un abrazo, Montse

Librería de Mujeres Canarias dijo...

Me cuesta mucho entenderlo y casi tanto asumirlo. Muy interesante el artículo y mucho, también, esa analogía que usted nos hace con el modelito de transición que exportamos.
Me entristece lo de Chile. Y me da miedo.
Feliz domingo.

Felipe Medina dijo...

Cuando hablé de este asunto dije que la Concertación sólo se dedicó a gestionar la política neoliberal encontrada.
No intentó cambiar nada,ni el modelo económico y social que como herencia había dejado Pinochet de la mano de los Chicago Boys.
No se gobernó desde la izquierda y mira que Bachelet tenía motivos personales para hacerlo.
Los electores han optado por lo original en vez de por una mala copia.
Democráticamente ni un pero,aunque la gran responsabilidad del impresentable Frei y Bachelet sea histórica.

Abrazos

Txema dijo...

Pero vamos a ver D. Kabi y resto de amigos de este blog. Cuando nos vamos a dar cuenta de que la izquierda está de capa caída en casi todas partes? Algo habremos hecho mal.

Antes o después, habrá que hacer un análisis serio de por qué esto es así. No vale sólo con amargarnos un poco más cada día.

Y, sobre todo, habrá que tomar las medidas necesarias para que esto no nos ocurra, si es que aún estamos a tiempo, de que no nos pase lo mismo dentro de dos años.

saludos

mariajesusparadela dijo...

Yo, sin entender gran cosa, creo que hubo un error en la elección del candidato.
Es una pena: América estaba inclinándose prometedoramente hacia la izquierda.

severino el sordo dijo...

Se supone que en democracia a los gobernantes los elige el pueblo,temprano se olvida viendo las imagenes creo que los chilenos van a necesitar algo mas de suerte y como dice Txema algo de culpa tendra la izquierda,saludos.