01 junio 2008

Una pesadilla de nunca acabar

En Córdoba, ciudad-califa por excelencia --¡oh bella casualidad!— han conseguido la nacionalidad española ochocientos ciudadanos saharauis. Han ido presentando la documentación, donde lo vital es demostrar haber nacido en el Sahara antes de 1979, recordemos que fue en esa fecha cuando el Sahara dejó de ser una provincia española.

Ahora resulta que desde el 30 de mayo no se admiten a trámite más expedientes de nacionalización. El gobierno asustado por el número de ciudadanos que pueden conseguir ser españoles, ha instado al fiscal de Córdoba para que frene este proceso, aludiendo problemas de forma, y desgraciadamente esta prohibición podría tener carácter retroactivo.

Hay que recordar que se estaba dando en Córdoba, porque la secretaria del juzgado y la jueza, no ocurría en otros sitios, han interpretado que hay jurisprudencia suficiente como para que se pueda aplicar la nacionalidad española a los nacidos en el Sahara antes de 1979.

Independientemente de la cuestión judicial, que como ya se sabe: quien hizo la ley hizo la trampa, y las interpretaciones pueden ser poliédricas. Me ocupa y preocupa la realidad política y social de los saharauis.

Tengamos memoria histórica también, para esto. El final del Sahara español no llegó por la petición de los propios saharauis, sino por la presión de Marruecos. No olvidemos la que se montó con la Marcha Verde allá por 1975. Hassan II, rey de Marruecos, ante la situación que vivía España –Franco estaba gravemente enfermo, moriría días después--, decide echar un órdago y moviliza a cerca de 400.000 marroquíes que se dirigen hacia la provincia española. Allí permanecieron hasta que se llegó a los acuerdos de Madrid, donde España cedió la administración de una parte de la provincia a Marruecos y otra a Mauritania, con la promesa de un futuro referéndum de autodeterminación.

La cuestión es que todavía no se ha resuelto el problema. Marruecos con un afán imperialista, similar al que tuvo España anteriormente, quiere apropiarse del Sahara y no da la posibilidad de que obtenga la independencia. El derecho de autodeterminación ha cedido al derecho de imposición que el pueblo marroquí, desafiando a la ONU, pretende imponer. Mientras tanto, los saharauis viven en campamentos aislados, en territorio argelino, sin patria y con carencias de todo tipo.

Pues bien, El Sahara fue español hasta 1979. Su cesión a Marruecos fue forzada y no fue solicitada ni deseada por sus ciudadanos. Aquellos ciudadanos eran españoles en aquel momento. Lo único que pretendían era una nacionalidad propia, o sea ser saharauis, nunca marroquíes. Puesto que a pesar de su voluntad se les obliga a ser apátridas, en contra incluso de la ONU, ¿que problema hay para que los que fueran españoles en 1979, lo sigan siendo hoy?

No son saharauis por un desamparo internacional y por una cesión de sus territorios por España a Marruecos. No son marroquíes porque no lo desean. ¿No merecen una atención por nuestra parte? No se puede mirar a otro lado cuando una gran parte de la responsabilidad es nuestra. La herencia de una situación irresuelta hace que estos ciudadanos, españoles en otro tiempo, hoy no tengan nacionalidad y que su “madre patria” les niegue su condición de hijos.

Antes de la Marcha Verde, El Sahara era español y de allí se sacaban fosfatos y otras materias primas sin ningún problema. Se estudiaba español y vivían integradas las dos culturas existentes. Hoy ha tenido que ser Córdoba la que nos ha dado otra señal de sincretismo. Desgraciadamente parada por el gobierno. Este gobierno que no quiere problemas con Marruecos y que ve a los saharahuis como inmigrantes –y de estos ya tenemos muchos-- y no como españoles, ahora ya no interesa.

Esta gente que un día era española y que soñó con tener nacionalidad saharaui, hoy sólo puede ser apátrida o rendirse y hacerse marroquí.

Salud y República

3 comentarios:

m.eugènia creus-piqué dijo...

Bon día Rafa.
Hoy me has tocado una fibra muy sensible, estoy con el pueblo saharaui y estaré siempre a su lado, me cae la cara de vergüenza esto que has dicho y que yo desconocía del gobierno español,tenemos el deber moral de ayudarles en todo, si queremos ayudar a inmigrantes de otros paises, creo que estos se merecen mucho más, fueron españoles hasta que les dimos la patada ¡ Que vergüenza !
Yo encuentro muy bien esto que se hacía en Cordoba, mi amiga M. Antonia me ha enseñado mucho sobre este pueblo, afable, caritativo, que lo dan todo aunque ellos se queden sín nada, tenemos que apoyar a que consigan ser lo que ellos quieren, mientras es poco lo que hacemos para ayudarles a que tengan una existencia mejor, que no les falte la comida, que puedan tener estudios, me pregunto como un gobierno socialista puede negarles a que vuelvan a ser españoles.NO LO ENTIENDO !!!!
Mis felicitaciones a Córdoba por lo que han estado haciendo hasta ahora, que pena que les hayan vetado esta gran labor.

Martine dijo...

"Marruecos culpable, España responsable" de la terrible situación que llevan viviendo desde hace más de 3 décadas este maravilloso pueblo saharaui , acorralado, perseguido, muchos de ellos "desaparecidos" impunemente, abandonado despues de tantas promesas no cumplidas.
"Viva el Sáhara libre" es lo único que se me ocurre, pero soy una soñadora empedernida... pero al menos que los que fueran españoles en 1979, lo sigan siendo hoy, al menos...

Un beso muy azul y muy cariñoso Rafa, gracias una vez más por denunciar la situación por la cual está pasando este pueblo amigo.

Anónimo dijo...

Es increíble esta situación. Que el trabajo de la justicia se vea detenido porque no interesa, porque los superiores judiciales ven una situación problemática en esto.
El Sahara es el daño colateral de la occidentalización de Marruecos.
Si se pudieran hacer paralelismos, actúan igual que en su tiempo Franco con los militares marroquíes tras la guerra civil. Echen un ojo a "Los perdedores": http://www.webislam.com/?idt=6823
Todo mi apoyo y cariño para los saharauis.