Ochenta y dos años de sonrisas y colores. De exhibiciones y deseos. De vivir y de sentirse vivo. Dispuesto a defender causas perdidas, con su credo rojo, rosa, violeta y amarillo.
Sereno y brillante cuando habla. Lengua suelta, simple y transparente, que emite emociones en mensajes sencillos y penetrantes.
Su traje rojo lo lleva con descaro, con una margarita, quizás la única duda. Canoso y con arrugas planchadas, lleno de insignias que provocan, camina sin ocultar nada, dejando ver su ideología con su estampa.
Si hay algo que le enfada y le revuelve las entrañas es la homofobia. Su alma rosa demuestra sin ambages, y defiende con firmeza 'el otro lado'. Sin dudarlo y con tono verdadero, es compañero de estos y de aquellas, de esas y de ellos.
El color violeta, defensa de mujeres indefensas, lo lleva con orgullo. Y cada vez que se produce el acto infame, lo llora, y maldice al malnacido.
No es catalán, pero se acerca. Defiende el amarillo y sus razones, con un lazo que propone libertad para políticos presos que son presos políticos. Con el deseo de que sea el pueblo catalán quien decida su destino.
Sin duda, ayer, mañana y hoy, cargando su mochila republicana con los ohenta y dos, sigue siendo Peko: Rojo, Rosa, Violeta y Amarillo. Un arco 'valeno' humano alegre y sencillo.
Gracias por tu amistad, compañero, y que sigas muchos años, como te dijo tu nieto, fabricando cosas imposibles.
Salud y República
P.D. El Peko es mucho Peko con los 82 que ha cumplido esta semana.
1 comentario:
Gracias María: Reconozco que soy presumido y si alguien, como tú María, me dice que soy guapo m,e pongo todavía más cvontento de lo que estoy normalmente. Gracias María, que cada día sonrías porque un día sin sonrisas es unj día perdido.
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