El otro día ya hablaba de ciertos resultados del estudio elaborado por los técnicos de Hacienda sobre el fraude fiscal.
Pero hay cuestiones que claman al cielo. Y, sin embargo, parece que nuestros políticos, sean tirios o troyanos, están contentos con lo que ocurre. Es más, pudiendo solucionarlo, no lo hacen.
No es la primera vez que los técnicos de Hacienda agrupados en GESTHA, hacen informes en los que acusan al Ministerio de pasividad fiscal y de enfoque equivocado.
Los resultados del estudio son preocupantes –me refiero que son preocupantes para la mayoría de los ciudadanos, no para los responsables políticos de turno ni para las grandes fortunas— puesto que dice a las claras que los que más pagan impuestos son los que declaran por rentas de trabajo, después los autónomos y pequeños empresarios y los que menos pagan son las grandes fortunas, donde se encuentran las grandes bolsas de fraude.
Para que nos hagamos una idea, las bolsas de fraude que han estudiado estos técnicos, se valoran en unos sesenta mil millones, de los que casi 43.000 (casi un 72%), son debidos a las grandes empresas, 16.000 (un 26% del total del fraude) lo cometen las pequeñas empresas y autónomos, y poco más de un 2% (1.500 millones) se debe a los asalariados y otros conceptos.
Una distribución éticamente intolerable, pero a la que los responsables de Hacienda no se atreven a meter mano. Es mucho más fácil machacar a los trabajadores que exigir que las grandes fortunas contribuyan de acuerdo a sus ingresos y patrimonio.
De esta forma se verifica que del fraude empresarial, las grandes empresas –que son 41.500 de un 1.420.000 de empresas, el 3%—, defraudan casi el 75%. Mientras que el 97% de las empresas restantes (las pequeñas y medianas que son 1.380.000) cometen el 17% del fraude.
Por otro lado, tres millones de autónomos, cometen casi el 9% del fraude. Mientras 20 millones de trabajadores cometen el 1,5%. Como se puede ver, una “distribución justa”.
Otro dato paradójico es que las grandes corporaciones, las 1354 que ingresan más de 180 millones de euros al año, cotizan a un tipo medio del 19,59%. Sin embargo, una pequeña empresa que ingrese entre 6.000 y 60.000 euros anuales lo hace a un tipo medio del 23,94%, O sea, ingresando seis mil veces menos, cotizan un 4,4% más. ¡Esto es lo que se llama Justicia Fiscal!
Este colectivo –GESTHA— ha instado, de nuevo a la Agencia Tributaria para que dedique sus esfuerzos a las grandes fortunas, que es de donde se puede obtener grandes sumas con menores esfuerzos. Sin embargo, ahí está el gobierno, hoy del PSOE y ayer del PP, que hacen caso omiso, y siguen favoreciendo, con conocimiento de causa y a conciencia, a las grades empresas, en detrimento de las pequeñas y de los trabajadores autónomos y asalariados.
Y ahora una de ciencia-ficción, ¿qué pasaría si se recuperara sólo la mitad del total del fraude fiscal y nos pusiéramos a nivel europeo? Simplemente que tendríamos un PIB superior al de Italia y cercano al del Reino Unido. ¡Cuestiones menores!
Salud y República
10 comentarios:
Claro Rafa. Los trabajadores pagamos nuestros impuestos casi siempre a través del IRPF y no a través de compliocadas ingenierías financieras que son más compliocadas.
Pero en este país este asunto lleva años sin solucionarse, y me temo, que tal como están las cosas va a seguir así.
Aquí no se puede decir que los ricos "también lloran", ni pagan.
un abrazo
Creo que todo se debe a un defecto en las lupas.
Un abrazo.
Hemos sido anexionados por Andorra y aún no nos hemos enterao
Todo se reduce a un problema de voluntad política.El Gobierno lo sabe mejor que nadie pero no le da la gana de "meterle mano" a estos poderosos.
No nos cansemos, este es un gobierno neoliberal y actúa como lo que es.
Saludos
Bueno, de estos ya no erece la pena ni hablar, pero la pregunta es que va a hacer Rajoy cuando "reine", con las grandes empresas no se va a meter, faltaría mas, así que a joder al mas débil, eso está claro, y de propina pondrá a funcionar una de sus armas secretas para obtener pasta, la subida del IVA, y si no, al tiempo, yo que los que piensan votarle, me lo pensaría dos veces...
Salud
Pero para qué quiere el Gobierno cambiar las cosas y enfrentarse a quienes están en condiciones de echarle un pulso ( y ganarlo) sí se pueden ir cerrando ambulatorios y guarderías, o cualquier tipo de equipamiento social, a los trabajadores.
Si hubieran hecho una política fiscal progresista, por un lado, y hubieran atajado el fraude fiscal por otro, no hubiera habido necesidad de atacar y atracar los bolsillos de los ciudadanos que dependen de sus cada vez más escuálidos salarios
Un beso
Hombre don Rafa, su clamor al cielo se ve que no es oido.
saludos
Esto solo evidencia que lo único que falta es voluntad política para realizar una salida progresita a la crisis.
Salud, República y Socialismo
Sería un buen comienzo, sin dudas!
Un abrazo.
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