Nuevos peperos fuertes: El Luisma y el Facha

Sí señores. Y es que los últimos nombramientos del PP parece que los ha nombrado la oposición. Primero fue Rafael Hernando, el facha. Ese tipejo que va de duro y cuya sensibilidad es propia de un escorpión. Con tal de mantener ese odio visceral le da igual insultar a las víctimas del franquismo que a los enfermos de hepatitis C, o a los manifestantes o a cualquiera que pase por ahí si no es de su cuerda.

Hasta ahora pensábamos que un portavoz en un parlamento debería ser una persona amable capaz de entenderse con los otros grupos y de llegar a acuerdos con ellos, o al menos intentarlo. Desde que ha sido nombrado Rafa Hernando se ve que el PP piensa que un portavoz del congreso debe ser una persona agria, desagradable, dura, fascistoide e incapaz de llegar a acuerdos con los demás grupos. Un tipo sin complejos que jamás rectifica cuando mete la pata y que siempre cree tener razón. Así, en principio, parece que es lo contrario de lo que debería ser, sobre todo en año de elecciones, donde las tensiones suelen castigar más al partido que gobierna que a los demás.

El otro nombramiento es el de jefe de campaña electoral. Y “the winner is”: Carlos Floriano, alias ‘El Luisma’. Así le califica Wyoming comparándole con el personaje de la serie Aida, un tonto simpático, solo que éste además no tiene nada de simpático, y sí de lo primero. Es el rey de las ocurrencias. Porque si se quiere ver cómo es posible hacer declaraciones insensatas, incomprensibles y falsas, ahí le tienen ustedes. Es el as. Entre sus activos está haber sido jefe de campaña de las últimas elecciones, donde el PP perdió 16 puntos y ocho escaños, en relación a las de 2009. Pues bien éste es el personaje que el Gran Mariano se ha sacado de la manga para poner al frente de la campaña electoral. Seguramente ha querido poner a alguien que esté a su altura.

No me cabe la menor duda de que el Partido Popular ha perdido los papeles y da estas elecciones por perdidas. Da la impresión de que juegas las cartas de la dureza y de la improvisación a la desesperada, con el fin de buscar un milagro, ese milagro que de vez en cuando invocan algunos de sus ministros meapilas como Báñez o Fernández Díaz.

En fin, parece que ha empezado la cuenta atrás y que, por fortuna, –salvo gran pacto del bipartidismo— podremos ver fuera de los gobiernos más importantes a ese partido popular que tanto daño ha hecho a este país, que tanto le ha empobrecido y que nos ha hecho retroceder diez años con pocas posibilidades de recuperación a corto y medio plazo.

Desde luego si yo hubiera tenido que nombrar estos cargos seguro que habría coincidido con el Gran Mariano. Dos pájaros de un tiro. Una elección que ha satisfecho a la oposición (la única en toda la legislatura). Por algo será…

Salud y República