Otra que tal baila. Una alumna aventajada de la lideresa Aguirre. Lucía Figar es Consejera de Educación y como tal es quien decide las condiciones para la adjudicación de las becas y ayudas que la C.A.M. (Comunidad Autónoma de Madrid).
Pues bien, ella ha sido premiada por ella misma con un cheque-guardería de 1100 euros. Su única condición: ser familia numerosa. Un criterio que cada vez más tiene poco que ver con la renta familiar. La situación actual hace que las parejas tengan poca descendencia –por cierto uno de los grandes problemas de este país: el envejecimiento de su población— salvo que se tengan suficientes recursos para mantener la prole. Y este es el caso de la familia de Lucía Figar.
Esta mujer (es cielina, o sea seguidora del grupo ultracatólico; Comunión y Liberación), abanderada de la enseñanza privada, es la que está llevando a cabo los grandes recortes en la enseñanza pública que han hecho que el ratio de los alumnos por clase aumente considerablemente, o que las becas y ayudas hayan disminuido notablemente o que no se sustituya a los profesores en baja o jubilados. Por cierto, mientras que ha mantenido las ayudas a la Enseñanza concertada y privada.
Así es que, sin ningún pudor ni vergüenza, esta mujer –de la que se ha hablado para futura candidata a la presidencia de la C.A,M. por el Partido Popular— ha solicitado y se ha adjudicado 1100 euros para la guardería de su hija pequeña. Ella tiene tres hijas y está casada con Carlos Aragonés, quien fue jefe de gabinete de Aznar cuando fue presidente del gobierno y hoy es diputado en el Congreso, y ha tenido la cara dura de solicitar y aceptar una ayuda por tener tres hijas, a pesar de que sus ingresos familiares son superiores a 125.000 euros netos anuales. ¿Hay derecho? Yo me lo guiso y yo me lo como: Doña Lucía Palomo. Es legal pero sin embargo es deleznable, inmoral y vergonzoso.
Resulta que se están reduciendo las becas y las ayudas, se están disminuyendo terriblemente las ayudas a los dependientes, a las asociaciones, a las ONG, y sin embargo ella recibe una ayuda importante de dinero público que se ha autoasignado.
Verdaderamente no existen palabras que puedan expresar tanta impunidad, tanta desvergüenza y tanta ignominia. Parece increíble que haya tanta insensibilidad en estos peperos incapaces de pensar en los demás y que sólo piensan en aquel famoso axioma de otro pepero mayor: “Estoy en política para forrarme”. Pues nada, guapa, ¡adelante! que todo el monte es orégano y como te votan...
Salud y República
2 comentarios:
Si los hay, y bastantes, que arriesgan ir a la cárcel por mangar lo que no es de ellos, esta, que lo puede hacer legalmente, aunque estoy de acuerdo contigo que es una cochinada, pues a pillar lo que se pueda, que mañana es tarde.
Si, bien que lo dijo aquel, y estos aprenden rápido que para eso están en política.
Salud
Si es que todo se vuelve pedir. La niña tiene unas notas excelentes. ¡Ains! Cuando unos pierden la vergüenza (en caso de que alguna ve la tuvieran) otros pierden el respecto, al final la culpa del chachachá.
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