20 febrero 2012

Violencia fascista en Valencia

Han vuelto los tiempos en gris. Del azul al gris hay un paso. Y ese paso lo ha dado la policía en Valencia. Con las peores formas de los peores tiempos, ha actuado contra jóvenes, la mayoría menores de edad, y contra todo el que han pillado por medio.

Esta es la tercera carga violenta de la policía en pocos días. De forma bestial, como si se tratara de terroristas, la policía ha actuado con salvajismo, más que con contundencia. No se trataba de deshacer la manifestación, sino de machacar a los manifestantes. Con cargas indiscriminadas, hoy, la policía –que en nada envidia a la policía criminal franquista, de otros tiempos—ha demostrado su poder, arremetiendo contra todo lo que se movía.

Estudiante herida Valencia

Todo empezó con una manifestación para protestar por algo “tan zafio, tan insignificante y tan injusto” como pedir calefacción para el Instituto Lluís Vives de Valencia, una vulgaridad, con lo bien que sienta el frío y lo majo que son los sabañones.

Pues a eso, contestó la nueva delegada de Educación y Descanso –perdón, quería decir delegada del gobierno—, Paula Sánchez de León, mandando un batallón de policías asilvestrados dispuestos a ganar una guerra. El enemigo, ya saben, jóvenes adolescentes que pasan frío. Y lo entendieron bien, les calentaron hasta decir basta. Actuando con ansia y con desazón, sin complejos.

El resultado, jóvenes heridos, detenidos e incomunicados. Menores de edad, sin que sus padres pudieran saber su estado. Probablemente, estos policías, sus jefes y la delegada provincial del gobierno han ingresado en el túnel del tiempo, retrocediendo cincuenta años.

La de hoy, ha sido la tercera manifestación, para protestar por la brutalidad policial. Y naturalmente la policía ha contestado como sólo se puede esperar de un cuerpo militar en una batalla.

Las imágenes que hemos estado viendo estos días, hablan por sí solas y mientras tanto, la delegada defiende a “su policía” y no cree necesario abrir ninguna investigación.

Ahora ya sabemos dónde ha ido el dinero que falta para calefacción en las escuelas, y para los hospitales. Ahora conocemos de que manera se gasta el dinero esta Comunidad, la más arruinada de España. Y naturalmente, no sólo en trajes del ínclito Camps, o en los delirios de grandeza plasmados en eventos deportivos o en instalaciones innecesarias, o tampoco en los dispendios megalómanos del insolente Carles Fabra. También se lo gastan en material antidisturbios, en pagar horas extras y en asilvestrar policías. El resultado ya lo hemos visto.

En un país normal, occidental, democrático, de los que nos quieren poner de ejemplo –cuando se trata de hacernos tragar alguna píldora amarga--, una delegada de gobierno así, hubiera sido cesada sin remisión. Aquí, quién sabe si no terminará de ministra.

Salud y República

13 comentarios:

javi dijo...

El titular lo resume perfectamente, violencia fascista. Hasta es posible que algún policía franquista se sonrojase ante estas actuaciones.

Esto acaba de empezar, represión pura y dura, nos van a llover hostias como panes.

Antonio Rodriguez dijo...

Ha sido cambiar el goierno y cambiar automaticamente la actitud de la policia. Hemos vuelto a la policía franquista que no piensa, que solo entiende de dar palos indiscriminados.
No cambian, los antiditurbios serán siempre lo mismo: masas de musculos sin cerebro. Solo cambian quienes los dirigen.
Salud, República y Socialismo

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Tenía conocimiento de la protesta y la represión, pero no sabía las causas. Ahora que me entero aumenta mi asombro al ver cómo se puede generar semejante caos en respuesta a un requerimiento tan inocente y fácil de negociar.

Muy preocupante.

Genín dijo...

La rueda de prensa del jefe de policía era para mear y no echar gota, al mas puro estilo fascista!
Besos y salud

tres dijo...

Completamente de acuerdo. Vergonzoso. Hemos vuelto al fascismo mas despiadado. Aún los pasivos y los crédulos nos dicen que vivimos en libertad. Hay que cambiar todo esto o acaban con nosotros.

mariajesusparadela dijo...

Y yo que tengo la impresión de que los que tienen miedo son ellos...
Así solamente atacan los animales salvajes cuando creen que están en peligro.

Dilaida dijo...

He vuelto a vivir años pasados, me he sentido tan mal que tuve que apagar la tele. Sentí tanta, tanta rabia que me ha sido imposible cenar.
¡Cuántos años perdidos!, creyendo que mis hijos y nietos heredarían todas aquellas libertades por las que yo había luchado a finales de los sesenta.
No hay duda, van vestidos de otro color pero son los mismos.
Han vuelto o nunca se habían ido y sólo habían cambiado la chaqueta para poder atracar a los contribuyentes y ahora que ya no hay dinero, ya se han sacado el disfraz y sacan a la calle sus perros de presa bien entrenados.
Bicos

Basseta dijo...

Los que usan la violencia para reprimir manifestaciones con como toxicómanos. La droga, su droga, son las porras. Empiezan con poco, pero luego ya no pueden parar. Y la espiral de violencia les conduce a su propio desastre. Nosotros tenemos que insistir en tomar las calles y manifestarnos de forma pacífica, es decir, no caer en la misma toxicomanía.

Ciberculturalia dijo...

Querido no había visto que tu también hablas de esta brutalidad y no me extraña porque es feroz.
Ahora te enlazo
Besos

Felipe Medina dijo...

Es de todo punto inaceptable en una Democracia que hehos como éstos ocurran.Esto me retrotrae a las cargas policiales franquistas y a las masivas detenciones.

Falla el poder político que ordena y la policia que está para asegurar la libertad de las personas cuando arroga atribuciones que no le pertenecen.

Saludos

Dean dijo...

Todo lo que sucede es porque la sociedad lo permite, y esta ya va por los extremos, tanta pasividad nos ha caracterizado, que la más mínima salida a la calle es destrozada con saña como si fuera un peligro real. Si las masas estuvieran enloquecidas celebrando un triunfo futbolero y destruyendo todo el mobiliario público, la policía estaría más tranquila, ya que con estas cosas no corre peligro el sistema; pero si son cuatro estudiantes que dicen: Señores, por aquí hay unos pocos que piensan y que están hartos de sus abusos, la cosa es diferente. Como se nota que esto lo tienen bien atado y no quieren que la primavera llegue a estos lares sino que permanezcamos en el oscurantismo.
Un saludo.

Eastriver dijo...

Es tan fuerte que no hay palabras. Tú lo salvas con la ironía, pero te juro que yo viéndolo por la tele es que no tenía ni palabras para comentarlo, para pensarlo ni para nada.

RGAlmazán dijo...

Javi, sí, es lo que es.

Antonio, sí, efectivamente se nota el cambio. De Guatemala a GuatePeor.

Mónica, son adolescentes que se han manifestado pacíficamente. Besos

Genín, cuando lo vi, pensé lo mismo.

Tres, hay que defenderse y cambiar esto, efectivamente.

María Jesús, yo creo que no es por miedo, es por prepotencia por sentir que tienen poder, por machacar al contrario (ya sabes, el enemigo). Bicos

Querida Dilaida, llevas razón eran imágenes del NODO, y es que hemos vuelto a la España en gris.

José Vte., pero ¿hasta cuando se podrá aguantar? No somos Gandhi y lo de poner la otra mejilla tampoco es la solución. Estoy de acuerdo en que no haya violencia, pero, después de episodios como éste, no olvidemos que la violencia genera violencia.

Carmen, una brutalidad bárbara de otros tiempos. Besos

Felipe, aquí falla lo que falla, pero nadie rectifica ni dimite, ni tan siquiera piden perdón. Es más, llaman violentos a los adolescentes.

Dean, lo que quieren como tú dices es que no haya luz, que vivamos en el oscurantismo.

Ramón, llevas razón. No hay palabras. Hay sólo hostias. ¡Tremendo!

Salud y República