07 agosto 2009

El corazón de un libro

En esta época donde la informática lo absorbe todo, (díganme, si no, qué puñetas hago yo aquí), donde lo virtual es tan real como lo real; donde no es concebible una casa --de ninguna manera, una empresa-- sin ordenador, donde los periódicos virtuales tienen cada vez más importancia y desplazan a los tradicionales, no creo que sorprenda a nadie la aparición de los libros electrónicos.

Yo que siempre he tenido, y sigo teniendo, un amor enfermizo a los libros, hasta hacer de ellos artículos preciosos, me pregunto hasta cuando podremos seguir gozando de libros tradicionales. Y es que la técnica no para. libro-e Leo este artículo y empiezo a temblar. Veo el metro lleno de gente leyendo en su libro electrónico. Y me parece absoluta ciencia ficción y me da más miedo que el fantasma de la ópera.

Y no crean ustedes que no soy capaz de apreciar las grandes ventajas que puede tener un libro electrónico. Desde luego, nada que objetar y sí reconozco que esos atributos que le adornan son muy útiles.

Por ejemplo, tener en un aparatito, similar en tamaño a un libro, trescientas novelas, un diccionario, un mp3 y una enciclopedia. La posibilidad de subrayar o colorear un texto, o de ver su versión original, poder aumentar o disminuir el tamaño de las letras, cambiar el color de fondo, etc. etc. Por no hablar de las ventajas que puede suponer el ahorro de papel, o sea millones de árboles sin talar, o el ahorro de espacio en las casas.

Sin embargo, no me veo yo con ese aparatito,libro porque necesito ver el libro, su volumen, ese papel, el olor cuando es nuevo, poder pasar las hojas, tener marcapáginas, Porque, ¿cómo se puede leer un libro sin tocar el papel? ¿Y el corazón? ¿dónde tiene el corazón un libro electrónico? ¿Cómo podrá palpitar Aureliano Buendía encerrado en una caja y a través de una pantalla? Y Lolita, ¿podrá coquetear igual desde ese extraño aparato? No, sinceramente no veo a Pepe Carvalho tratando de investigar un crimen dentro de ese envoltorio.

¡Qué le vamos a hacer! Ya sé, ya se lo he dicho. El libro electrónico tiene muchas ventajas, pero yo soy así, y ¿quién ha dicho que yo sea racional o que prefiera lo útil?, déjenme que alguna vez me salga la parte sentimental, que también la tengo, y les diga que yo no veo una casa sin libros o una ciudad sin bibliotecas. Seré un tipo raro, un iluso, un romántico, pero me gusta tanto tocar un libro...

Salud y República

13 comentarios:

Txema dijo...

Pues ya somos dos querido amigo.

¡Y el olorcillo ese que sueltan las páginas de un libro nuevo! ¿qué me dice, eh?

un saludo

Dean dijo...

Son geniales los e-books, pero seguro seguro que los de papel no se va a acabar, o por lo menos en materiales sintéticos imitación del papel, pero que puedes hojear, palpar y sentir el palpitar como tu dices, esos no se acabarán.
Un saludo.

Martine dijo...

.. Y este flirteo previo.. el acariciar sus tapas.. mirarlo , admirar el acierto del ilustrador que se hizo cargo de la cubierta..Y luego meterse dentro, saborearlo, olerlo..Es toda una historia de amor... y algunos te dejan marcas para toda la vida, como un amor verdadero.. Comparto tu preferencia, Rafa, de todas todas...

Sigo con mi Amor del momento "La classe" de François Bégaudeau... se acerca setiembre..

Un beso, con papel.. tinta.. pero sobre todo cariño, Rafa...

Txema dijo...

Mi amor provenzal que romántica estás esta mañana. Flirteo.... ummmm

Dilaida dijo...

Bueno, lo que pasa, yo creo, es que nosotros somos de otra generación, yo no sabría que hacer con ese aparatito. Mi hija mayor lo compró hace algún tiempo y a mi se me hace raro verla leyendo esa "pizarrita" y eso que ella me habló de todas sus ventajas, las mismas que tu señalas y además lo que te ahorras, en espacio y en dinero.
Bicos

m.eugènia creus-piqué dijo...

Querido Rafa comparto tu opinión al máximo como EX gran lectora que soy, no hay como tener en la mano un libro que te hace vibrar y su olor, en mi caso este chisme me puede ir muy bien porque podrá agrandar las letras y convertirlas en elefantes sín tener que atarme a la lupa.Tambien pienso que lo que dice Dilaida tiene razón, estamos ya un poco pasados de rosca.Besos guapo.

m.eugènia creus-piqué dijo...

TXEMA
Me estás poniendo los cuernos ?????

Txema dijo...

Yo? no nada de eso. Es una "boutade", para que Selma se anime.

RGAlmazán dijo...

Txema, no sé si afortunada o desgraciadamente somos más de dos. Seguramente algo tienen que ver los años.

No estoy tan seguro Dean, en este mundo priva lo útil y me parece que en eso gana el e-book. Pero hay tantas cosas inútiles y bellas que tendríamos que cambiar la escala de valores. En fin, no sé si lo veré, pero me temo que a largo plazo el libro convencional será una pieza de museo.

Selma, totalmente de acuerdo, lo que yo siento por los libros es amor, ¡qué le vamos a hacer! Un beso.

Dilaida es verdad, pero también hay algo más. A mi modo de ver es mucho más útil, pero también más frio, un libro electrónico que uno convencional. Y la calidez cuenta también, además de los años. Bicos.

Gèni es un problema de generación pero también de amor a ese artículo mágico que es un libro. Por cierto, cuando puso lo de agrandar las letras pensé en ti, que te quejas de las letras pequeñas. Besos.

Por cierto, queridos y queridas, aquí no pone los cuernos nadie a nadie. ¿No habíamos quedado en casa de Gèni que todos estábamos por las orgías y el amor libre? Este Txema quiere todo, es un conquistador, un galán de los de antaño.
Besos a repartir, menos al chino.

Salud y República

Paco Piniella dijo...

Yo he dedicado un par de post al tema, me parece que hay que coger el tema sin miedo, ahora vuelven los discos de vinilo y los CD no se venden, solo hace falta un lapiz de esos para archivar la música. ¿quién sabe?
Salud y buen finde

Ciberculturalia dijo...

Creo que ambos soportes van a convivir mucho tiempo. La narrativa, en general la literatura la leeremos en soporte papel. En eso que veo que a todos, buenos lectores, nos encanta: el libro.
Los lectores de libros electrónicos tiene un uso también muy apetecible: para lecturas rápidas, para lecturas profesionales. Si te vas de viaje, a viajes largos con problemas de peso en equipajes es una solución fantástica porque tienen el tamaño de un libro de bolsillo. Cada vez más los editores usarán este medio como suplemento y complementario al papel con lo que tendremos una buena bibliografía. Ese futuro es ya.
Nuestros amados libros, con hojas de papel, los seguiremos disfrutando. Pero podremos elegir el soporte para cada ocasión.

Yo no estaría preocupada

Un beso.

Neogeminis Mónica Frau dijo...

me quedo con los de papel, sin dudarlo!


saludos!

Montse dijo...

A mí me encantan los libros también. Si leyera todos los que compro... Los compro casi como pequeños tesoros, supongo que algún día los leeré. No obstante, como soy una comodona, he pensado que un libro electrónico que además te lea con una voz súper agradable el contenido, no estaría nada mal. ¡Todo se andará!, jajaja.