06 noviembre 2009

666, ¡cómo me gusta!

Yo no lo sabía, pero me persigue Satán. Estoy convencido de que me está mandando señales. Y allá él, lo tiene crudo. No me importa un bledo si me persigue, si me manda señales --aunque preferiría un jamón--, si me está guardando una parcelita en el Averno. Al revés, me gusta. Ese sitio calentito, donde seguramente estarán muchos de mis amigos, y donde gracias a sus malas artes no podrán entrar los roucos, aznares, botines, juancarlos y demás dictadorzuelos, meapilas, superempresarios y monárquicos de pro, ya que como ustedes saben, les basta usar el confesionario y ¡hala! al cielo. No me dirán que no es un chollo asegurarse un sitio lejos de esos próceres salvapatrias a los que, queramos o no, debemos soportar en vida.

Así es que cuando he sabido que el seis me persigue, me he puesto contento. Es un número mágico y si son tres seises, no veas, ya el colmo. 666 El número de Lucifer. El primer seis que encontré me ha encantado, estar el sexto en este concurso donde todos los blogueros pueden votar sin intermediarios, me parece una buena nueva. Pero es que acabo de ver que también el número seis me persigue en esta otra clasificación. Wikio es una lista de prestigio que mide la influencia de los blogs, y a mí en el apartado de blogs políticos me coloca en sexto lugar. No dirán que no es para inflarse (no me hagan mucho caso que estoy de buen día, solamente).

Y entonces empecé a pensar que el seis me persigue. Dos seises, un seis de Bitácoras, un seis de Wikio, pero me faltaba uno. Y ¡oh! ¡encontrelo!, cómo no había caído antes. ¿Qué día es hoy? Seis. Ya está el otro seis. Juntos el 666, el número de la bestia. ¡Aggg! Ahora estoy más tranquilo, ese triple seis me parece una profecía. Finalmente me veré libre de gente que se da golpes de pecho y que todo lo que hacen se les perdona. Y estaré con gente maja, que se equivoca, que vive, que hace cosas buenas y menos buenas, pero que es gente normal, con quien se puede hablar, charlar y todo lo demás. Los otros se lo pierden. Yo no. Me quedo con esa parcelita asegurada en las tinieblas, donde no tendré que aguantar más a esa gentuza y, además, me han asegurado que tienen ADSL. ¡Qué gustazo!

 

Salud y República

13 comentarios:

Felipe Medina dijo...

Enhorabuena,Rafa.
El 6 es un bonito número que nunca alcanzarán los "roucos, aznares, botines, juancarlos y demás dictadorzuelos, meapilas, superempresarios y monárquicos de pro" porque con la adsl que operan sólo les permite 1 mb,la número uno de insolencia,avaricia e indignidad.

el 6 es un bonito número porque opera con dignidad y sabiduría.

Usted debe pasar un buen día,por merecido

Saludos

Freia dijo...

Bueno, Rafael. Pero que nos esperen mucho tiempo en ese sitio tan calentito y libre del que nos habla.
Beso seis dedos de sus manos y seis de sus pies.

severino el sordo dijo...

666 linea regular hasta el infierno,mejor esto que viajar en autopista al cielo,hay lugares a los que les pierde el nombre,un saludo y buen fin de semana.

Antonio Rodriguez dijo...

Pues yo le gano e iré a un sitio privilegiado del infierno porque tengo cuatro seises.
Mi teléfono empieza por 6666.
Así que no me da envidia.
Salud, República y Socialismo

Sota dijo...

Cómo no le va a perseguir el Maligno, don Rafa, si es usted un rojazo, un ateazo y un masonazo? Coño, que el Maligno es usted, lo menos!

mariajesusparadela dijo...

Me pido un sitio cerca del tuyo.

(Nunca entendí como los dibujos animados japoneses después de la terrible bomba, son tan agresivos).

Manuel dijo...

Y también tenías 6 comentarios hasta que entré yo a comentar, ahora tienes 7.

Ciberculturalia dijo...

Querido Rafa me alegran mucho tus éxitos que veo que te hacen muy felíz. Espero que en esa parcela asegurada en las tinieblas nos hagas un hueco a tus amigos blogueros. Allí todos estaremos estupendamente y además poniendo a parir a los buenos de la película.
En fin, una gozada
Un beso y enhorabuena

Antonio dijo...

Bueno, no te pienses que eres el único que se va a librar de ellos. El nº de mi casa es el 66 y vivo en el piso 6, ya tengo un 666, pero la matrícula de mi coche es 6665, ya tengo otro 666. La bestia me persigue...!!!
Pero, si por casualidad tuviera razón Sota y el Maligno fueras tú, te pido una recomendación. Vamos… un tráfico de influencias, para encontrar un buen sitio, con castañitas asadas, chimenea y el calorcito que dé vida a mi frío cuerpo inmaterial.
Por cierto, maestro del averno, que puntúa más un poker de seises, como tiene Antonio Rodríguez, o un doble trío como tenemos nosotros?
Un saludo calentito

neptuno28 dijo...

Está peor que yo don Rafael y ya es decir.

Pero es un loco maravilloso.

Enhorabuena por su triple 6.

Un saludo DESDE y POR LA izquierda.

Sota dijo...

Antonio, leches, que al poker se juega con cinco cartas! NO SE PUEDE tener un doble trio!

Vale lo de guardarse seises en la manga, pero esto es excesivo!

RGAlmazán dijo...

Gracias Felipe. Y sí que se jodan.

Freia, condesita, no tengo prisa, pero cuando llegue, que será el siglo que viene, le guardaré un sitio cerca. Siempre me ha gustado estar cerca de la aristocrácia. Beso sus manos.

Pues sí, Severino, dónde va a parar.

Oiga, Antonio, no presuma que además de esos tres seises tengo otros tres al principio del teléfono, pero eso no es mérito propio, es mérito de Rivas, que como usted sabe es una ciudad diabólica.

Sota, ruego por el bien de todos y para que no tenga que actuar, que no descubra mi identidad.

María Jesús, te lo guardaré. Pero no hagas travesuras. Bicos.

Manuel, no te preocupes, que lo mismo llegamos a 66, y si no, por lo menos al 16.

Querida Carmen, me gusta de vez en cuando vacilar y darme autobombo, pero no hay problemas, piso suelo. Y querida para tí también hay sitio. ¡Faltaría más! Besos.

Antonio, ya veo que eres un diablillo adelantado, estás rodeado de seises. Pero ojo, que como dice Sota, de poker debes entender poco, pues dos tríos no se pueden tener, en la misma mano. Aunque te he entendido, jugamos con seis cartas, que para eso somos miembros de las profundidades.

Neptuno, ¿hay alguien cuerdo? Bueno sí, pero a esos no me quiero parecer.

Salud y República

Angel Adanero dijo...

Enhorabuena por sus seises. Aunque para decepcionarle un poco le diré que el 666 ya no es el número de la Bestia. ¡Se siente! Por lo visto la ciencia avanza que es una barbaridad y según las últimas investigaciones el número del Maligno es el 616.
Lo mismo sus seises van por las criaturillas esas que bailan en la catedral de Sevilla.
Mire que lo siento. Usted que se veía en el infierno y resulta que está llamando a las puertas del cielo.

Un saludo.