02 septiembre 2008

La fe, la ciencia y la razón

Cuando se trata de hablar, discutir, reflexionar sobre algo, lo solemos hacer como si fuera lo más normal. De hecho, esta aptitud debería ser una diferencia en relación con los otros seres vivos que conocemos. Razonar es algo que nos diferencia de los otros animales. Al menos eso parece.

Una premisa para poder discutir, discrepar y razonar sería utilizar la razón, lo que no siempre ocurre. Se discute en muchas ocasiones sobre cuestiones que no se pueden probar, que se escapan de la esfera del discernimiento, en definitiva, que están basadas en la fe.

La fe es por antonomasia enemiga de la ciencia y la razón. Empieza donde éstas terminan. Es la creencia en algo indiscutible, es un "don" del que no todos disponemos. Las religiones son un ejemplo de instituciones basadas en la fe. De hecho, en la religión más cercana que tenemos, el Cristianismo, la fe se atribuye a un "don divino" (donado por el Espíritu Santo).racionalidad

Es por ello que en cuestiones relativas a la fe, entiendo que no es posible la discusión. Quien cree, aprehende los dogmas correspondiente y los interioriza con esa "capacidad" que le da la fe. Sin embargo, los que no tenemos ese don, somos incapaces de entender ciertas cosas utilizando la razón y la experimentación para encontrar la explicación necesaria.

Mientras que la razón se basa en argumentos que se construyen de acuerdo con la experiencia, la ciencia y en general el discernimiento, la fe está basada en creencias que no pueden ser sometidas a métodos científicos. En definitiva se cree o no se cree. Se puede discutir sobre los hechos que provoca, sus consecuencias, pero no sobre su sustancia.

Hace tiempo que no discuto sobre temas de fe, pues no es posible utilizando la razón y la ciencia. Los que no creemos estamos fuera de esa aura que impregna lo irracional de la fe. Son dos planos distintos.

Pediría a los que creen, que vivan y dejen vivir. Lástima que muchos de ellos se empeñen en adentrarse en terrenos que les son ajenos, mezclando los dos planos que son paralelos, haciendo que en este mundo impere la irreflexión y el fanatismo según dioses, creencias y demás mitos que son patrimonios de la irreflexión.

Salud y República

12 comentarios:

Luna Carmesi dijo...

Los Dioses dan muchas excusas a la ignorancia.

Besos.

m.eugènia creus-piqué dijo...

Es lo que tu dices Rafa la fe se tiene o no se tiene, o se ha tenido y se ha perdido y la machaconería de las religiones en hacerte tener fe hace que muchos caigan en sus redes pero que otros se separen completamente de ellas tan rápido como puedan.Somos muchos los que todavía corremos despavoridos huyendo de una infancia y juventud atormentada por curas y monjas y lavados de cerebro diarios.

Naveganterojo dijo...

Quiza la fe es la unica escusa que les queda a los que no tienen escusas.
Salud y republica

Anónimo dijo...

para alguien laico lo que acabas de escribir es una perogrullada, para un creyente es imcomprensible... el diálogo es casi imposible

Anónimo dijo...

Ni dios ni patria ni bandera. Si además quitamos las herencias y prescindimos de los politicos ¿os imaginais en que mundo podriamos vivir?
El Canuit

Antonio Rodriguez dijo...

Los que controlan la fe de las personas pretende explicar el mundo desde una base acientífica y de paso controlar la mente de las mismas mediante el miedo y el castigo celestial de los que disiente de los dogmas de fe.
Para la fe no existen ni ciencia ni razón solo los principios dogmáticos con los que los iluminados de turno pretenden controlar el mundo, y que, además, en la mayor parte de las ocasiones también persiguen la dominación de una parte de la sociedad sobre la otra.
Salud, República y Socialismo

Angel Adanero dijo...

A mí eso de la fe siempre me ha sonado a trágala. A no preguntes por qué son así las cosas, a son así porque lo digo yo y punto.

Un saludo.

Sota dijo...

Cierto es que no se puede discutir sobre la fe, porque como usted mismo dice, es algo que se tiene o no se tiene, tan irracional y al mismo tiempo tan constitutivo de la esencia de la persona como una fobia o un fetiche sexual. Incluso desde el punto de vista católico más canónico, la fe tiene consideración de gracia, es algo que dios concede o no (lo cual da para muchas risas cuando estás hablando sobre el tema con talibancillos de vía estrecha y, llegados a este punto, les espetas un "pues ves a quejarte a Dios, que es quien no me la ha dado a mi").

PERO lo que si es susceptible de ser analizado desde un punto de vista crítico, racional y científico es el dogma y los textos sagrados. Que los diez mandamientos no son más que normas de urbanidad básicas o que las prohibiciones que impone la comida kosher no son más que normas básicas de seguridad alimentaria en una sociedad que no tenía métodos para conservar los alimentos.

El problema viene en que esos casos son cosas muy simples y que se encuentran en la parte más baja del corpus religioso, y que a la que empiezas a subir un poco más el análisis crítico lo derrumba todo como castillo de naipes. Un dios no puede ser de paz y amor y al mismo tiempo dedicarse a destruir ciudades con lluvias de fuego y azufre.

Yo nunca criticaré que una persona tenga fe (siempre y cuando no quiera imponérmela a mi). Ahora, si me quieren contar un cuento de hadas, al menos que no tenga incoherencias.

Anónimo dijo...

"No creo en Dios y no me hace ninguna falta. Por lo menos estoy a salvo de ser intolerante. Los ateos somos las personas más tolerantes del mundo. Un creyente fácilmente pasa a la intolerancia. En ningún momento de la historia, en ningún lugar del planeta, las religiones han servido para que los seres humanos se acerquen unos a los otros. Por el contrario, sólo han servido para separar, para quemar, para torturar. No creo en Dios, no lo necesito y además soy buena persona."
¿quien lo dijo?
Al Canuit le encanta

Anónimo dijo...

si amas el dialogo,has de buscar personas ke también lo amen. No es facil si no nos entendemos, mucho más dificil si no lo pretendemos. Es lo ke suele ocurrir con la mayoría de los"creyentes" ke amén de no cumplir con sus propíos preceptos kiern a toda costa imponerlos a los demás. He tenido experiencias en la iglesia ke me han hecho sonrojar de verguenza ajena, y eran precisamente los representantes de dios en la tierra los que ensoberbecidos han herido y hieren la sensibilidad de los que si respetan al ser humano y su libre pensamiento.

Gemma dijo...

A mí me parece que seguimos en las mismas. A fin de cuentas, en mi opinión los nacionalismos no son más que una forma de religión política...

:-(

fritus dijo...

me encantaría decir algo inteligente pero es que soy un mono...ya me gustaría a mi ser un humano,rey de la creación, hecho a imagen y semejanza de Dios, ( que no sería tan bueno si empezó ya extirpandole una costilla, sin anestesia ni nada) como explican en las highschool de USA que siguen el creacionismo...pero es que yo soy más de Darwin y del Anís de Badalona, oiga...

La Fe mueve montañas, y la Fe por un pelín no quema a Galileo ...pero bueno, un montón de libros y de autores sí que sucarrimó, la fe....nos ha jodío.

Un abrazo