31 marzo 2011

¡Indignaos! Gritemos juntos contra la indiferencia

Este grito que surgió del político pensador francés, de noventa y tres años, Stéphane Hessel que, con un librito de poca más de treinta páginas, ha sido capaz de vender cerca de dos millones de ejemplares.Indignaos

La tesis es sencilla. No es posible continuar con los brazos cruzados, hay que luchar pacíficamente contra el poder económico y financiero, ese que ha tomado el timón y que manda sobre los gobiernos, lo que comúnmente se conoce como: Los Mercados.

Este anciano comprometido con la vida y con el progreso dirige este grito a los jóvenes, a los que les conmina a tomar el relevo, a hacerse dueños de ese cabreo e indignación necesaria. A las nuevas generaciones que parecen dormidas. Hay que rebelarse pacíficamente, hay que ser insurrectos antes que conformistas o pasotas.

Cabreémonos y mostrémonos en contra de la política unidireccional, porque es mentira que no hay alternativas. Es mentira que sólo se puede ir hacia el norte. Podemos y debemos gritar para decirles que no es así, que queremos otro mundo. Que otro mundo es imprescindible.

Me despido con un poema de Luis García Montero que nos dejó en el día de la poesía, la semana pasada, y que he rescatado de Confluencias:

Las revoluciones son un asunto propio

No conozco un dolor
que no merezca ser compadecido.
Ningún silencio reina
sin temer el momento de romperse.
No hay poderes injustos
que no sepan controlar la rebeldía
tejida por sus sombras.
Salgo a la calle, leo los periódicos,
navego el mar de leva que mueve las noticias,
observo las coronas, las órdenes exactas,
los palcos de la fiesta,
lejanamente oigo
la voz de los discursos.
Después de las llamadas de teléfono.
de los barcos hundidos,
del pescado sin sal
y de los comentarios
son estas las razones de que siga en política.
El mundo es triste y duele
y no existe un dolor
que no merezca ser compadecido.
El reino del silencio
a veces se ha llenado de música en dos ojos,
en una libertad provisional
o en una historia que nos cuentan.
Y la sombra alargada del poder
esconde limoneros de dignidad,
documentos alegres que resisten
y lagrimas de menta para la despedida.
Por eso sé que las revoluciones
son un asunto propio
como ropa que duerme a los pies de la cama.

Salud y República

P.D. El cartel lo he copiado de aquí. Gracias Lóis.

15 comentarios:

Unknown dijo...

Estamos también un poco cansados de indignarnos.
El lunes vi un documental sobre la situación de los parados de Lear. Con 600 millones de beneficio cerraron la fábrica y deslocalizaron. La noticia dicha así parece una más pero cuando ves el rostro de los despedidos te impacta muchísimo.
Y los poderes públicos agasajando a la patronal.
Un abrazo.

Juan Pardo dijo...

Antonia si estuviéramos realmente indignados estaríamos haciendo algo más. La indignación ha de ir seguida de la reacción, y yo no observo mucho movimiento.

A mi me gustaría recomendaros también otro libro. "Contra la indiferencia" de Josep Ramoneda. En él habla de la indiferencia como arma del poder para controlar las situaciones. Me ha gustado mucho y es un libro corto y fácil de leer.

Un saludo.

http://graficacritica.blogspot.com/

Pablo dijo...
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pablo dijo...
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Neogeminis Mónica Frau dijo...

Me encantó la poesía y la propuesta de este buen señor! Si perdemos el sano espíritu de rebeldía (de nuestra juventud, sobretodo) el mañana se nos presentará sin ninguna alternativa.
Un abrazo!

Pablo dijo...
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Pablo dijo...
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Felipe Medina dijo...

Si antes lo que está cayendo no nos indignamos no sé cuando.

Stéphane Hessel no tuvo que hacer un "mamotreto" de libro porque las razones expuestas son tan sencillas que en poco espacio cabían.


Stéphane Hessel y José Luis Sampedro dos hombres de avanzada edad y,sin embargo,luchando por un mundo mejor

Saludos

Anónimo dijo...

Leí el libro en la versión francesa en cuanto me enteré que apareció. Sin embargo, lejos de lo que esperaba consiguió indignarme más. Creo que no dice nada que no se sepa vox populi. Intereses hay que vociferan a los cuatro vientes su conversión en best seller, eso y las influencias del autor, claro. Me gustaría saber por qué no se habla de otros libritos, que aunque están a la venta, permanecen bastante silenciados y ocultos en las estanterías de las librerías.
Con todo, me quedo con la reflexión final del librito, la que tiene que ver con los poderes mediáticos. Si no entendemos que los medios son los altavoces del poder vamos mal.

Salud!

Pablo dijo...

OHhh que pena...

http://video.google.com/videoplay?docid=5539613947839465921

belijerez dijo...

Existe ahora un diagnostico; "depresión social" provocada por el llamado mercado laboral, que maltrata a las personas trabajadoras convirtiendolas en puros objetos de compra-venta, además del maltrato psicológico que consiste en decirles que no estan preprados, que no valen, que no son competitivos, que no son productivos..etc.etc. Ejercen sobre el colectivo y con los mismos esquemas del maltrato hacia las mujeres por parte de machistas.

Es dificil actuar con una gran masa esclavizada.

mariajesusparadela dijo...

Gritemos juntos, para que nos oigan.

Ciberculturalia dijo...

Así es. No sólo hay que indignarse. Hay que reaccionar sino se quedaría en un simple pataleo y ya eso no es suficiente.
Besos

Genín dijo...

Espero que los jóvenes tomen el relevo del cabreo, y sigamos nosotros cabreados sin cesar...
Salud

RGAlmazán dijo...

Amigas y amigos, hace tiempo que llegó la hora de indignarnos con motivos de sobra. Sin embargo, la gente no se moviliza, y los jóvenes menos. Basta ir a las manifestaciones y ver la poca gente que hay y de ella, menos jóvenes.
En fin, estoy seguro de que algún día esto explotará, pero cuanto más tarde peor, porque las soluciones deberán ser más radicales.
Gracias por vuestros comentarios, besos y abrazos a repartir.

Salud y República