Sigo por los medios de comunicación la discusión sobre la prohibición de las corridas de toros en Cataluña. Este debate del parlamento catalán responde a una ILP (Iniciativa Legislativa Popular) que llegó con 185.000 firmas, y que está previsto por el Estatuto de Autonomía.
Recuerdo que la ILP está prevista en la Constitución, en el artículo 87.3 y que prevé 500.000 firmas para llegar al legislativo y también lo está en algunos Estatutos de autonomía, como en el caso del catalán (se requieren 50.000 firmas).
Desgraciadamente esta democracia, a mi entender de baja intensidad, no tiene prácticamente enlaces entre el poder constituyente, el pueblo, y el poder constituido, los órganos elegidos por el pueblo. Lamentablemente, casi todo se reduce a votar cada cuatro años y punto final. No hay control desde el pueblo soberano y salvo la ILP, de difícil factura y no vinculante, no hay posibilidad de intervención desde la ciudadanía, en cuestiones de gobierno entre elecciones.
Por eso hay que agradecer que llegue alguna ILP a los parlamentos, autonómicos o central, y se vincule una iniciativa popular al parlamento para su estudio y, en su caso, su votación. Aunque sólo sea por higiene democrática. Aunque sólo sea porque no hay otras posibilidades de participación fuera de la esfera del poder público.
Por lo tanto, bienvenida la iniciativa que ha provocado que a petición de los ciudadanos, avalada con sus firmas, llegue hasta el parlamento para su debate y votación.
Una vez dicho esto, quiero manifestarme, como ya lo he hecho en ocasiones anteriores a favor de la abolición de las corridas de toros. Y me gustaría intentar desmontar los argumentos que, unos con buena fe y otros tratando de falsear la realidad, defienden los que están a favor de la llamada Fiesta Nacional.
Con mala fe, en este argumento la cosa queda meridianamente clara, dicen muchos amantes de los toros que se quiere prohibir este espectáculo en Cataluña porque se llama Fiesta Nacional y los catalanes no quieren saber nada que lleve ese adjetivo. Craso error, esta iniciativa parte de una asociación animalista de ámbito extra-catalán y somos muchos, los no catalanes que nos gustaría que ocurriera lo mismo en nuestras autonomías. Naturalmente quien así piensa no hace sino demostrar esa catalanofobia que muchos tienen.
También es fácilmente desmontable el argumento de que el toro no sufre. Hay que ser inhumano, cobarde y no sé cuántas cosas más para decir que el toro no sufre porque está preparado para ello por una cuestión hormonal ya que liberan “betaendorfinas”, también conocidas como la “hormona de la felicidad”. Naturalmente esta tesis de un tal Illera –estudio realizado por encargo de ganaderos--, ha sido desmentida por la gran mayoría de los veterinarios.
La tesis más extendida, de los que no se atreven a decir las barbaridades anteriores, es la de libertad. No se obliga a ir a una plaza de toros a nadie, por lo tanto el que no quiera ir que no vaya. Es gracioso ver como esta tesis la mantienen gente como Rajoy, capaces de entender la libertad de ir a una plaza de toros pero no la que tienen las mujeres a decidir sobre su cuerpo, en el caso de la interrupción del embarazo. De cualquier forma, los actos libres no pueden implicar ningún tipo de tortura o violencia contra seres vivos, incluidos los toros. Porque quien disfruta viendo torturar a un animal está demostrando unos sentimientos que rallan en lo patológico.
Por cierto,los empresarios, ganaderos, toreros y demás profesionales de este “arte de matar toros”, no dicen nada de las subvenciones que recibe la cría de las reses y las que los municipios otorgan para que se celebren corridas, sin las cuales no podrían llevarse a cabo. O sea que con el dinero de todos, se está pagando un espectáculo de tortura y muerte.
Al contrario del debate en el parlamento catalán –fíjense la diferencia—, y al albor del mismo, en la C.A.M. ya ha salido Ignacio González diciendo que se está tramitando un expediente para declarar “Bien de Interés Cultural” el espectáculo taurino. O sea, ante la posibilidad de que pueda ocurrir lo mismo, el gobierno de Espe-rancia Aguirre blinda la fiesta y deja constancia de que una ILP en Madrid, sería inútil, evitando la única posibilidad de participación directa de la ciudadanía en el asunto.
Ojalá se extendiera el debate a toda España y se pudiera discutir sobre el tema y votar su posible abolición. Por cierto, que hablando de referendo, también en Rivas Vaciamadrid, el alcalde prometió celebrar el año pasado una consulta sobre la conveniencia de que hubiera toros en las fiestas, y no se sabe nada más. Desde aquí pido a José Masa que cumpla su palabra –fue él quien lo dijo personalmente en un pleno— o que explique qué ha cambiado para no hacer el referendo. Lo que no es de recibo es callar y no dar explicaciones a la ciudadanía cuando se ha dado la palabra.
Salud y República
14 comentarios:
Hay un momento, al final de todo, cuando ya le han clavado el estoque y el pobre animal dobla las patas y agacha la cabeza y entre convulsiones y desangramiento por la boca evidencia que tiene las entrañas reventadas...pues bien, en ese momento el torero aprovecha para alzar los brazos y buscar una ovación del público....¿ como puede la gente aplaudir en un momento así? . Si eso no es la mayor muestra de locura colectiva del ser humano, comparable a los linchamientos, a las lapidaciones , o las manifestaciones nazis, que baje Dios y lo vea..
un abrazo
Desde luego es un espectáculo de lo más sangriento y muchas veces sádico.
En mi opinión lo mejor sería acabar con ellas de una vez por todas. Pero me temo que va a haber mucha resistencia.
No hay más que ver la reacción insensata de la comunidad de Madrid, donde la quieren declarar de interes ¡cultural!
Bueno, vamos a ver que pasa en Catalunya porque puede servir de aldabonazo.
saludos
Cada vez me siento más catalán... a pesar de lo que me gusta mi tierra, pero es que pensar que en Andalucía quiten los toros es como que quiten el kárate en Japón... en fin
Salud
Impresinoante entrada Rafa cuyo contenido asumo en su totalidad. Sigo también con interes lo que está ocurriendo en Cataluña para ver si al menos ello supone el principio de un fin taurino.
Tu reflexión sobre esta nuestra democracia de la que tan solo participamos cada cuatro años, también la hago mía.
Un beso
No puedo más que adherirme a lo que se ha dicho aquí. Nunca he entendido ni lo de la "fiesta taurina" ni lo del "arte de los toros", ¿arte?, ¿fiesta?. ¡Qué locura!. Ojalá se prohibieran las corridas... y todas las barbaridades que con la excusa de "la tradición" hacen a los animales en muchas localidades durante sus fiestas patronales.
Saludos
Bravo Rafa.
Pero Espe-rancia ha dado su estocada...es increíble su afán de protagonismo.
¿Qué diversión puede haber en ver como agoniza un pobre animal, mientras unos cuantos acribillan su cuerpo y él se va desangrando?
¿Puede haber algo más sádico?, sólo a persona de la calaña de la "Rancia" se le puede ocurrir declarar eso como de interés cultural. A no ser que sea para demostrar su "extensa" y "basta" cultura.
Bicos
Totalmente de acuerdo, como catalán la verdad es que estoy orgulloso, aunque asumo que el orgullo me durará poco, puesto que la cosa no prosperará; o convocarán elecciones, o algo pasará, ya verás tú. Un abrazo.
Pues si mal no recuerdo hace un montón de años que en Canarias prohibieron las corridas de toros, si señor.... ¿Será una colonia de Cataluña?
Salud
Afortunadamente en Canarias no existen esas fiestas que se ven a lo largo y ancho del territorio peninsular, en las que se maltratan a los animales, y no hacen falta para nada. Me parecen fiestas bárbaras, me pregunto si los paises desarrollados tienen unas fiestas similares, ya es hora de evolucionar, seguro que no hay muchos intelectuales que compartan estas costumbres arcaicas.
Un saludo.
Rafa una visita de médico para decirte que los toros son una salvajada,cosa que ya sabes.Besos rapidos.
Rafa,lode las ILP,s es un raro mecanismo que al final no llegan a buen puerto.
Lo que más me está interesando de la ILP catalana sobre los toros es el grado de participación que se lestá dando a los ciudadanos en defensa y en contra de las corridas de toros.Es un buen ejercicio democrático que ciudadanos y ciudadanas expongan en la tribuna de las Cortes catalanes sus puntos de vista.
Otra cosa que me ha causado buena imagen es la libertad de voto que se les ha dado a los diputados autonómicos al inicio del trámite parlamentario,aunque al final se va a imporner la discipina de voto.
Es un sano ejercicio democrático que por supuesto es impensable en la Comunidad de Madrid.
Es un buen debate que se ha hecho eco de lo que la sociedad viene planteando,tanto a favor como en contra.
Abrazos
Comparto en todo tu opinión, Rafa, aunque en este caso particular me cuesta creer que esta salvajada aún hoy sea considerada "fiesta tradicional" y como tal,sea defendida por muchos!
Un abrazo.
Un escrito magistal, Sr. Almazán.
Mi agradecimiento por su cobertura y posicionamiento escribiendo (yo) desde la ciudad Barcelona, como firmante de la I.L.P. y sobretodo como persona.
El ser humano es una clase de simio que puede ser tremendamente cruel y violento. Si nos hacemos a los propios Homo sapiens lo que llegamos a hacernos, a los que no son Homo sapiens no hay cosa abyecta que no seamos capaces de hacerles.
Pero el ser humano es un simio que también puede ser tremendamente sofisticado, sensible y harmonioso. En nuestra versión inculta, asalvajada y animal somos de lo peor. Cuando nos culturizamos, nos sensibilizamos y nos humanizamos, somos capaces de muchísimo.
Hace unos miles de años un monje zen dejó escrito: "mientras haya espacio, existirán los seres sensibles; mientras haya seres sensibles, allí estaré yo para servirles".
Esta I.L.P., que esperemos que triunfe, llega a nuestro país con retraso. El primer paso de civilización lo dieron en las Canarias hace unos 20 años, efectivamente. Hoy nosotros, los catalanes continuamos, de manera impecablemente democrática, a través de una I.L.P. y todo un debate parlamentario, enmiendas y votaciones de los diputados.
Cosa muy distinta, hay que destacar, que la hecha por algunos reyezuelos/as cuasi absolutistas que se dedican a sacar decretazos, concentrando y adueñándose del poder, y sofocando el proceso democrático por el que todo país de ciudadanos libres se caracteriza.
España (sus Autonomías, ciudadanos...) llega a este estadio de civilización con muchos años de retraso si la comparamos con el resto de países de nuestro entorno.
Ahora es nuestro momento.
Saludos cordiales,
Publicar un comentario