30 junio 2008

Cómo recibir las hostias

Hasta ayer cada quisqui podía utilizar su libertad como bien quisiera. En todo los ámbitos y más en los de recibir, sobre todo si se trataba de hostias.

Yo creía que las hostias se recibían de forma involuntaria, por distintas razones, o cuando uno se las buscaba, pero que no había que guardar unas reglas para su buen recibir.

Por ejemplo, recuerdo recibir una hostia cuando en la mili le pedí un permiso a un sargento (tenía el pobre poco sentido común). Hay quien recibe una hostia sentado en una moto cuando se estampa por hacer un caballito (esas son merecidas). Hay hostias que te dan cuando menos te las esperas y por las causas más insospechadas, así, es un suponer, para que cantaras, antes en las comisarías, te daban unas buenas hostias y andando (son pedagógicas, enseñan a cantar mejor). Luego también hay hostiones, o sea hostias monumentales, por ejemplo la que se dio Izquierda Unida en las últimas elecciones, o la de Lorenzo con la moto hace quince días. Hay hostias, que te hacen ver las estrellas, son las famosas hostias luminosas.

En fin, que las hay de todo tipo y forma, y se pueden llamar: sopapo, leche, meco, leñazo, golpe, mamporro, galleta, mojicón, tortazo, pescozón, colleja, soplamocos, leñazo, coscorrón, guantazo, porrazo, estacazo... Todas suelen ser hostias no regladas. Pues, amigos lectores, esto ha cambiado, ahora lo importante, eso dice Ratzinger y su Iglesia, basándose en el rito tridentino (qué coño será ese rito, ¿no lleva tridente Satanás?) es saberlas recibir.

Ya no hay dudas, las hostias no se reciben así porque sí. No, hay que reglamentar su recepción. Las hostias, en el siglo XXI, hay que volverlas a recibir de rodillas y en la boca. ¡Qué dolor!

Salud y República

6 comentarios:

Naveganterojo dijo...

Te has olvidado la peores hostias que muchos hemos recibido en la vida:las que nos daban los"santos padres" en los colegios de pago,nos las daban con total alegria y como si nunca se fueran a gastar,nos las daban por hablar,por reir,por mirar por las ventanas,por llegar un minuto tarde,por salir un minuto tarde,por ser hijos de obreros,por no saber la leccion,por no contestar deprisa,por tropezarnos en el patio,por jugar al futbol y perder,por.....creo que nos las daban hasta por vivir.
¡¡Que buenos recuerdos me trae la frase de este individuo que estuvo en las ss hitlerianas !!.
Salud y republica

m.eugènia creus-piqué dijo...

Ah ! Pero es que las hostias ahora no se reciben de rodillas y en la boca ? No sabía que había cambiado el protocolo.
Para hostias las que me daba mi madre de pequeña, las recibía por todos lados hasta por respirar.Eran otros tiempos en los que juré que a mis hijos no les pegaría nunca.

Antonio Rodriguez dijo...

Está Vd. un poco picajoso e irreverente con las cosas sagradas.
Como dice el refran "donde hay potrón no manda marinero".
Entonces ¿como pretende un padre prior de pueblo leer la cartilla a su Santidad?

Mal veo su futuro en la carrera eclesiatica, en cualquier momento le excomulgan o le mandan a un lugar recóndito del Amazonas a cristianizar herejes.
Salud, República y Socialismo

Luna Carmesi dijo...

Se estan equivocando en la decoración del escaparate...

Ellos se lo buscan...

fritus dijo...

Fijate tú que me ha venido a la cabeza la peli esa de la "pasión de Cristo", en la que cuando Jesus habla con María madre, o con María Magdalena, o con sus discipulos lo hace en arameo ( que como todo el mundo sabe es esa lengua muerta en la que juras si te das un martillazo) sin embargo, cuando los legionarios fríen al pobre maestro a latigazos con instrumentos con puntas metálicas ( gatos de nueve colas, y esos horrosos útiles) cuentan los latigazos en latín ( centum, centum-et-unus….) .El pobre Jesús si recibió las hostias en latín.

Son tan jodidamente lameculos que usan el idioma del Imperio opresor. El idioma del poderoso. Pero como son más antiguos que los baúles de la Piquer es el idioma del poderoso antiguo. Para ellos modernizarse sería hablar inglés con fuerte acento tejano. Sure,man.

Un abrazo.

Antonio Flórez dijo...

Es también de mucho efecto que la jerarquía de la iglesia católica se niegue reiteradamente a admitir la confección de las ostias con productos sin gluten, para que los católicos celíacos puedan comulgar según sea su voluntad.

En términos breves, la iglesia lo que dice es que quien quiera recibir a Cristo mediante la ostia sagrada, que se joda si le sienta mal, incluso si las consecuencias son graves.

Los designios del Señor (cuando es con mayúscula es que es Dios o el señorito, que tanto da) son inescrutables. O sea, que no tienen escroto.

Un saludo.