Gemma Mengual: una verdadera proeza

A menos de dos horas del partido de fútbol (un partido que sólo es importante por la mala actuación española hasta este momento), el llamado deporte rey lo llena todo. He recorrido varios periódicos, he escuchado varias emisoras, pues bien, dentro de la sección de deportes, el fútbol acapara los más extensos artículos y reportajes.

Parece como si el campeonato del mundo de natación fuera algo accesorio. Y así se podría entender si no fuera porque una nadadora catalana llamada Gemma Mengual ha sido capaz de ganar seis medallas (no me he equivocado seis medallas), cuatro de plata y dos de bronce, junto con el resto del equipo español de natación sincronizada.


Esta semana será su semana de gloria, ya verán Uds. como el lunes apenas se hablará de natación sincronizada (y eso qué es; ¡ah! sí lo de la catalana esa que ha ganado varias medallas). Sin embargo, el fútbol con lo que pase dentro de un par de horas, sea positivo o no, nos dará la tabarra hasta aburrir al más futbolero. Y de Gemma, nunca más se supo (hasta las próximas olimpiadas).


Yo que he sido futbolero, he de reconocer que cada vez me gusta menos el fútbol. Primero, porque cada vez es menos vistoso y más plomo, y segundo, por todo lo que le rodea. No es posible que un mediocre jugador de la selección española (mediocre por los resultados que consiguen, forma objetiva de medirlo) pueda ser glorificado hasta la saciedad y pagado como un magnate del petróleo --un jugador seleccionado puede tener unos ingresos anuales entre 300.000 y 3.000.000€--, mientras otros deportistas de élite como es el caso de Gemma Mengual y sus compañeras cobren unas becas de unos 30.000€ anuales. Con el agravante de que estas desportistas entrenan duramente durante ocho horas al día para poder conseguir lo que los futbolistas no han visto ni en pintura, medallas en los campeonatos mundiales.


Así se escribe la historia, los ingresos de los futbolistas son una inmoralidad, pero el sistema es lo que tiene. Hoy, que puede que sea otra mierda de partido, se volverá a batir el récord de audiencia y el "share" se disparará hasta alcanzar el 50%. Y si no al tiempo. Mientras tanto, rápidamente, Mengual, Tirados y las otras nadadoras caerán en el olvido. ¡Qué injusto!

Gracias chicas, lo vuestro ha sido una verdadera proeza, aunque no tenga el reconocimiento que merece.


Salud y República