08 marzo 2017

El PP y las mujeres

Que no nos engañen. Sólo palabrería. Al PP le importa un carajo la violencia de género o las desigualdades entre hombre y mujer. Ellos van a lo suyo, y desde luego entre sus prioridades no están las políticas de igualdad de género y contra la violencia machista.

Como se sabe, ‘el movimiento se demuestra andando’. Y, por mucho que digan, por mucho que repitan que están por la igualdad de género, no ponen los medios para conseguirlo.

Mientras que durante los últimos años del gobierno pepero se han llenado las arcas de los bancos y los presupuestos de Defensa han aumentado todos los años –en 2017 está previsto un aumento del 30%--, mientras que la desigualdad laboral entre hombre y mujer se ha mantenido (las mujeres cobran salarios un 25% menos, tienen trabajos más precarios y mayor dificultad de ascender a puestos directivos, etc.) y el paro femenino es un 20% mayor que el de los hombres, el presupuesto en políticas de igualdad y de lucha contra la violencia de género ha disminuido, en la última legislatura, un 20,9%.

Esto es lo que cuenta, ‘obras son amores y no buenas razones’. Si al PP le hubiera interesado alcanzar la igualdad entre hombre y mujer hubiera destinado más recursos a conseguirlo. Todo lo demás: artificios y bengalas. Palabras y mentiras.

Y es que les pasa como con el franquismo. Al menor descuido enseñan la patita. Y van desde hacerse la mujer florero, con “el no sé, no me consta”, como Ana Mato o Espe Aguirre, cuando las preguntan por las corrupciones de sus allegados, hasta hacer del 8 de mayo, una fiesta propia de la Sección Femenina Franquista, como esta ocurriendo en Rota, donde el programa para celebrar este día es:

Hoy, y no les da vergüenza, hablan de igualdad de género como si se implicaran en la lucha y sin embargo, destinan a las partidas de igualdad y lucha contra la violencia de género el 0,01% del presupuesto, y organizan fiestecitas como las de Rota.

Ya está bien de mentir. Ellos siguen yendo a lo suyo, y lo suyo es mantener el poder machista. Eso sí, salvando la cara con discursos políticamente correctos –no vaya a ser que les calen--, mientras disminuyen los medios para solucionar el problema. Actuando, con lágrimas de cocodrilo, cuando ocurren asesinatos machistas, y al mismo tiempo destinando menos recursos a combatirlos. ¡Basta!

Salud y República

1 comentario:

Genín dijo...

Y sin embargo, sus mujeres representativas, Cospedál, Levy, Aguirre, Cifuentes, la vice, en fin todas esas peperas que hay por ahí con cargos, están encantadas de la vida chupando del bote, y deseando que dure...
Salud