30 abril 2013

Hay que tener paciencia: Rajoy dixit

Y D. Mariano apareció en directo, sin plasma, eso sí, delante de los suyos, los empresarios. Y ha dejado frases lapidarias. Porque después de habernos hundido en la absoluta miseria va y dice, por ejemplo: Hay que tener paciencia. Sin duda, somos unos impacientes. Porque pretendemos ganar Zamora en una hora. Y es que somos insaciables. No somos pacientes porque:

    • Queremos que disminuya, en menos de tres años, el desempleo.
    • Pretendemos que no nos desahucien.
    • Exigimos que no nos rebajen el sueldo.
    • Queremos que en una legislatura no aumente el paro.
    • No soportamos el hambre y sed (también de justicia).
    • No sabemos soportar las mentiras ‘piadosas’ del gobierno.
    • No nos conformamos con que nos destruyan el Estado del bienestar.
    • Queremos que los bancos y banqueros paguen sus errores.
    • Queremos que los dependientes reciban ayuda.
    • Sabemos que hay otras posibles alternativas.
    • No sabemos esperar a que la Virgen del Rocío, la CEOE y los bancos nos arreglen el problema.
    • Pensamos que solamente en diecisiete meses se invertirían las tendencias.
    • Nos manifestamos a pesar de Cifuentes y Cía.

Somos impacientes por todo y sobre todo porque somos españoles, derrotistas, rojos y biológicamente incapaces de sacrificarnos.

Y también ha dicho que no debemos cambiar el rumbo. O sea que vamos bien, vamos cojonudos, a punto de morir de éxtasis.

Pero no se conforma sólo con eso porque además, queriendo defenderse, dice una verdad como un templo: "No hace falta que les diga que, tras la profunda reestructuración efectuada, la situación ha cambiado por completo". Como si no nos hubiéramos dado cuenta, ha cambiado a mucho peor, eso ya lo sabíamos.

Por eso, seguramente, hoy hemos conocido otro dato más. Las rentas de capital suben el 3,6% mientras que las del trabajo bajan e, 5,2%. ¿Es que Rajoy necesita más datos?

Todo es un contubernio contra el gran Mariano. La izquierda explosiva ha montado un circo de impacientes, incrédulos y desagradecidos para poder criticar a este pobre gobierno que es un incomprendido, a pesar de que todo lo hace bien. Los ciudadanos no tenemos perdón. Somos unos ingratos.

Por eso, porque no tenemos capacidad de sufrimiento, queremos que este país empiece a salir a flote y que no se hunda en la miseria. Por ello los trabajadores nos manifestaremos mañana. Y le pedimos a Rajoy, de forma impaciente, que se rinda y se vaya. Que deje que otros lo intenten. Que no tenemos paciencia para aguantarle más. Que descanse y nos deje descansar.

Cartel 1_Mayo_2013

Nos vemos mañana en las manifestaciones del 1º de Mayo. Más necesaria que nunca.

Salud y República

6 comentarios:

mariajesusparadela dijo...

Me uno a la impaciencia.

Genín dijo...

Este señor para mi ha perdido toda la credibilidad, no pierdo ni un segundo en escucharle, es perder el tiempo, a ver si tiene un poco de dignidad y se va!
Salud

Dean dijo...

Un primero de mayo bastante extraño; habría que cambiarlo por el día de los sin trabajo, de los sin techo, de los sin futuro. Los criminales normalmente han tenido un poco más de escrúpulos que estos elegidos por mayoría absoluta, espero que la agonía no se siga alargando demasiado y algo cambie en este país.
Un saludo.

Kina Fernández dijo...

Se veía claramente que, antes de las elecciones, Rajoy estaba atacando a la (supuesta pero falsa) izquierda con argumentos de izquierdas que, sabíamos, no tenía ninguna intención de aplicar. Estaba deseando ganarlas para cargarse el estado del bienestar con el pretexto de la crisis y es, justamente, lo que ha hecho. No sé de qué nos asombramos. El neoliberalismo es así, ni más ni menos. Alemania dice lo mismo que ellos piensan, por eso son tan obedientes.

Lo que todavía no entiendo es que, hartos de la política del PSOE, la gente votase a alguien que iba a hacer lo mismo elevado a la super-enésima potencia. ¿Alguien se creyó que iba en serio el discurso electoral? No puede ser que, a estas alturas, sigamos siendo tan ingenuos.

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Si te hago yo la lista de nuestras impaciencias, nos pondríamos a llorar a dúo!
=(

el jardinero tranquilo dijo...

Paciencia, una palabra simple que exige mucho a cambio. “La paciencia no se recomienda ni se ordena”, escribió Maurice Blanchot. La paciencia es una opción que uno toma libremente, sabiendo que toda elección es, en sí misma, una forma de acción. La paciencia no es pasividad. No en vano David, al enfrentarse a Goliat y a sus tropas, gritó: “Señor, ármanos de paciencia”; pues la paciencia es en efecto un arma temible. http://www.eljardinerotranquilo.blogspot.com